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El cabello se reseca debido a que ya no está protegido por la grasa natural que lo cubre normalmente, y en consecuencia empieza a estar más fino, áspero, poroso y sin brillo. Para evitar que esa capa que protege el pelo de forma natural siga disminuyendo, te aconsejamos no lavar tu cabello todos los días. Limita el lavado a cuando sea estrictamente necesario, con hacerlo cada dos o tres días, tu melena se mantendrá perfectamente limpia y bonita.

Elegir bien los productos de higiene para lavar el cabello es algo a lo que debes prestar un poco de atención si quieres reparar tu pelo en profundidad. Es preferibles que selecciones champús y acondicionadores específicos para cabello seco con componentes hidratantes que nutran las fibras capilares desde las raíces hasta las puntas. Lava el cabello con suavidad para evitar que se parta y deja que el acondicionador penetre durante al menos 10 o 15 minutos antes de retirarlo, así tu melena quedará más suave al tacto.

Y, por supuesto, para tratar el cabello seco y dañado un paso que no puedes olvidar es el ade aplicar una mascarilla nutritiva al menos una o dos veces por semana. Puedes adquirir las que encontrarás en perfumerías y tiendas cosméticas o, si lo prefieres, sumarte a la cosmética natural y elaborar tus propias mascarillas caseras que son también muy eficaces. Entre las que ofrecen mejores resultados para combatir la sequedad, encontramos:

• Mascarilla de aceite de oliva y huevo.
• Mascarilla de aguacate.
• Mascarilla de plátano y miel.
• Mascarilla de yogur natural.
• Mascarilla de aceite de almendras.

En el artículo Cómo preparar una mascarilla casera para cabello seco puedes ver la receta al completo y la forma de aplicación de cada una de ellas. ¡No te lo pierdas!

Las fuentes de calor somo secadores, planchas, tenacillas o rizadores son de los utensilios que más dañan el cabello y lo debilitan. Por ello, siempre es bueno dejar secar el cabello al aire y, si no es posible, aplicar previamente un protector térmico por toda la melena de manera uniforme para que no se resienta tanto con las altas temperaturas. Te aconsejamos consultar los artículos Cómo secar el pelo sin dañarlo y Cómo proteger el pelo del calor de la plancha para hacer un buen uso de estos aparatos.

Aunque se trata de un remedio natural, masajear el cuero cabelludo con aceite de oliva o aceite de almendras justo antes de lavar el pelo, es uno de los tratamientos que más funciona para reparar el cabello seco y devolverle su vitalidad original. Ambos aceites son potentes hidratantes naturales y si los calientas y los dejas actuar sobre el cabello durante unos 15 o 20 minutos, notarás los resultados de manera instantánea.

Otros ingredientes como el aloe vera, la cerveza, el vinagre de manzana o la mayonesa también se perfilan como increíbles tratamientos naturales para el pelo maltratado. Descubre de qué forma aplicarlos leyendo el artículo Remedios caseros para el cabello dañado.

No hay mejor cura para el cabello seco y dañado que un buen corte de pelo. Librar a tu melena de las partes más maltratadas, hará que puedas renovar tu cabello por completo favoreciendo así que crezca saludable, luzca radiante y mucho más fuerte y denso. Pide cita en tu centro de estética habitual y tu peluquera te podrá aconsejar sobre cuántos centímetros necesitas cortar para sanear la melena.

Si deseas leer más artículos parecidos a cómo tratar el cabello seco y dañado, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Problemas de cabello.